He formado parte de este coro durante 9 años: la mitad como alumna y la mitad como ex alumna. Durante mis años de estudiante, el coro representó un espacio para disfrutar y aprender sobre algo que siempre me ha apasionado, pero no había tenido la oportunidad de participar en una actividad similar previamente.
Siempre fue un pequeño oasis donde podía divertirme y alejarme un poco del estrés de los estudios, lo cual considero muy necesario. Ahora que ya estoy graduada, pienso que realmente fue un lugar donde obtuve un gran apoyo cuando lo necesitaba y que me ayudó a tener un balance entre mis estudios y otras actividades.
La verdad me siento muy privilegiada de poder haber aprendido a lo largo de los años de maestros tan ejemplares como Salvador y Carlos. Tanto ellos como mis compañeros han sido una gran inspiración que me ha llevado a seguir aprendiendo más aspectos sobre la música. Hoy en día, además de realizar mis actividades profesionales, sigo participando en diversos cursos y clases de música, que siento que como muchas otras cosas de mi vida, tuvieron su origen en el ITAM. El coro me ha permitido vivir nuevas experiencias que nunca imaginé y seguir formando parte de la comunidad ITAM, y por eso estoy muy agradecida.